Chopin

Sinopsis
Las mazurcas y polonesas de Frédéric Chopin se convirtieron en la encarnación del espíritu polaco. Pero, ante todo, su trascendencia emerge de la exploración de las posibilidades expresivas del piano, instrumento con el que desvelo una dimensión sutil y una intensidad romántica que, curiosamente, eran rasgos poco valorados en su época, en la que se prefería la fuerza y la espectacularidad en las interpretaciones.
A través de cartas y diarios, esta biografía va delineando la personalidad solitaria y extremadamente sensible de Chopin, su carácter melancólico e indeciso y su temperamento trágico y violento, sobre todo ante los desgarros de su Polonia natal. Aunque no estaba interesado por los asuntos políticos, el descontento social y los anhelos de identidad nacional de la Europa que le tocó vivir no sólo le atormentaron sino que fueron contaminando íntegramente su obra.
El libro ahonda particularmente en los años en que Chopin vivió en París. Aparece entonces la Francia reinada por el duque de Orleans y el París que abogaba por la libertad de expresión y pensamiento, en donde los artistas, escritores y músicos más perspicaces expresaban nuevas emociones y tensiones dramáticas de un modo sutil vinculado tanto a su época como a la herencia clásica: Victor Hugo, Balzac y Lamartine como la vanguardia literaria, Delacroix liderando la escuela romántica de pintura y Lisa y Berlioz como los músicos más progresistas... Chopin vivió inmerso en esos círculos notables que se separaban de la tradición formalizada y la etiqueta restrictiva del pasado para buscar nuevos lenguajes expresivos.
Dulce, jovial, encantador en sociedad, el Chopin enfermo era desesperante en la intimidad. Su espíritu estaba desollado en vida; el pliegue de un pétalo de rosa, la sombra de una mosca, le hacían sangrar. Palabras de su amante, George Sand, que estuvo con él en los primeros tiempos de esa tuberculosis que comenzó por alterar profundamente su ánimo y terminó llevándole la vida a los 39 años.