Evocación (IBD / POD)

Sinopsis
Una serie de circunstancias facilitaron
que retomara mi afición narrativa a partir
de 1989, ya en Zaragoza, de forma que
mi segundo libro apareció en 1990,
y ese mismo año salió el tercero.
Me he documentado viajando, hablando
con la gente, observando, consultando
fuentes, recogiendo testimonios, tomando
apuntes, leyendo libros por lo que
en mis obras hay una mezcla
de inspiración, fantasía, documentación,
experiencias propias y conocimiento
de las vidas ajenas.
Suelo tardar bastante tiempo
en terminar una novela porque corrijo
minuciosamente. Dejo mis textos
sin publicar si no acaban
de convencerme. Mi principal interés
es encontrar satisfacción y emociones
humanas en lo que hago.
Si, además, lo que escribo le complace
a alguien, me alegro doblemente.

Este libro tiene dos objetivos: atender una solicitud y hacer
un regalo. El origen de la solicitud y el destino del regalo coinciden en la misma persona: Feli Orúe. Desde hace muchos
años viene insistiéndome en que ponga por escrito todos los
avatares de mi vida laboral.
Durante más de medio siglo he trabajado en la docencia, la
administración pública, la empresa privada, la acción política, el periodismo, la investigación y la literatura.
Mi respuesta hasta ahora ha sido que el tema puede interesar
a nuestros hijos y nietos, a parte de la familia, a los buenos
amigos y poco más. Sin embargo, he decidido atender sus
deseos para hacerle un regalo singular con ocasión de nuestras bodas de oro matrimoniales.
Pero me he limitado a describir mi trayecto literario y sus
aledaños del modo más objetivo posible. No incorporo a esta
semblanza el relato de mi trabajo profesional dentro de la
administración pública, salvo cuando es referencia obligada.
El libro está dividido en dos partes. La primera, Recuento
de Letras y Música, es una crónica, en parte cronológica y
en parte temática, de mi trayectoria. La segunda, Apéndice
bibliográfico, se divide en tres secciones: libros personales,
libros compartidos y libros colectivos. Son todos los que
están, pero no están todos los que serán, porque la vida sigue.